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Cómo mejorar tu productividad en el coworking aplicando la técnica Pomodoro

Técnica Pomodoro

La productividad es uno de los valores más importantes en el desempeño laboral. Sobre todo si hablamos del emprendimiento.

Vivimos en un mundo plagado de distracciones. Que si WhatsApp por aquí, que sí notificación de Insta por allá… ¡Vaya odisea puede ser concentrarse!

Sin embargo, con la técnica Pomodoro esto ya no tiene por qué ser así. Una metodología que se ha puesto de moda y que te animamos a que apliques en tu coworking.

Ya verás lo mucho que te rinden los tiempos tanto a ti como al resto de los compañeros.

La técnica Pomodoro se basa en la idea de que trabajar en períodos cortos y enfocados puede ayudar a mantener alta la energía y evitar la fatiga mental. También proporciona una estructura para mantenerse enfocado y evitar distracciones, ya que durante cada intervalo de trabajo se evita cualquier tarea no relacionada con el trabajo actual.

Qué es la técnica Pomodoro

Lo primero es lo primero: ¿qué es la técnica Pomodoro?

Pomodoro es “tomate” en italiano. Un término que poco o nada tiene que ver con tu rendimiento profesional. No obstante, hay que remontarse a 1980 para entender su origen.

La técnica Pomodoro la creó Francesco Cirillo, un consultor y coach italiano, quien medía su tiempo de trabajo con un cronómetro que tenía la forma de este fruto.

Se trata de una metodología en la que se trabaja en intervalos de 25 minutos. Pasado este tiempo, se hace un descanso de 5 minutos.

Cada intervalo se conoce como pomodoro.

Una vez se cumplen cuatro pomodoros, se puede hacer una pausa de entre 15 y 30 minutos.

De este modo, se fijan los plazos de trabajo y los de descanso. Siguiendo dicho sistema como un reloj durante las ocho horas de jornada.

Cómo funciona la técnica Pomodoro

Pomodoro es una técnica que se fue desarrollando con el paso de los años. Tanto como para que Francesco Cirillo escribiera un libro detallando el sistema.

Así que hay toda una ciencia alrededor de la jornada del “tomate”. Aquí te explicamos de forma resumida cómo funciona:

  • Preparación. Define las tareas pendientes y pon tu temporizador a 25 minutos. Concéntrate para su ejecución.
  • Apunta los éxitos. Cada pomodoro que cumplas, apúntalo como completado y descansa 5 minutos. Al completar cuatro, haz la pausa de entre 15 y 30 minutos. Es decir, cada dos horas.
  • Combina tareas. Las actividades menos complejas, es decir, que cuestan menos de un pomodoro en completarse, se deben juntar.
  • Desglosa tareas complejas. En el lado opuesto, encontramos los proyectos que requieren más de cuatro pomodoros. Estos se deben dividir para así encajarlo a las métricas de tiempo correspondientes.
  • Grábate a fuego cada intervalo. Nada de distraerse en mitad de un pomodoro. Cúmplelo y resérvate cualquier tema que vayas a revisar para el descanso.
  • ¿Y si termino antes? Genial. Puedes aprovechar el tiempo restante para adelantar tareas o para profundizar en el objetivo que acabas de cumplimentar.
  • ¿Y si la distracción es inevitable? Hay cuestiones que no se pueden posponer. No pasa nada. Atiéndelas, tómate un break de 5 minutos y vuelve a empezar.
Chica trabajando en la oficina
Chica trabajando en la oficina

Ventajas de su aplicación

El objetivo principal de la técnica Pomodoro es aumentar la productividad. No obstante, hay que hablar de otras tantas ventas de su aplicación.

Ten en cuenta que esto supone un antes y un después en la dinámica laboral. Por lo que es muy probable que los resultados no lleguen de la noche a la mañana. Primero hay que acostumbrarse a esta metodología.

Sin embargo, estos son algunos de los beneficios más destacados:

  • Sencillez en la realización. (25 minutos de trabajo + 5 de descanso) x 4 = 30 minutos de descanso. Así de simple es la fórmula, por lo que es muy sencilla implementarla.
  • “Think outside the box”. Mantener esta rutina de productividad y descanso, mejora la creatividad y sirve para organizarse en mayor medida. Lo cual suele conducir a ideas muy originales; lejos de la caja de la que tanto hay que salir.
  • Despídete de la procrastinación. ¿Alguna vez has tenido una tarea pendiente y la has ido posponiendo? Seguramente sí. Con la técnica Pomodoro esto no sucede así, ya que tienes unos plazos fijos para su realización. Sin distracciones en el proceso: la alarma suena para dictaminar tus tiempos.
  • Resuelve los proyectos más complejos. Los bloqueos son grandes barreras que impiden a los emprendedores avanzar como toca. Sin embargo, con esta metodología, dejarás espacio en cada descanso para liberar la mente. Una forma de refrescar las ideas en aras de encontrar nuevos puntos de vista cada 25 minutos.

Técnica Pomodoro: apps disponibles

Está bien: para aplicar la técnica Pomodoro solo se necesita un cronómetro en el móvil. O mejor aún, el temporizador.

No obstante, en CWO nos apasionan las apps. Unas herramientas mucho más completas y, por qué no, con diseños preciosos.

Estas son algunas de las aplicaciones más destacadas. Tú eliges cuál instalas en tus dispositivos.

  • Pomodoro Timer. Es un temporizador muy sencillo de configurar. Su principal ventaja es que es personalizable, contando una interfaz de lo más cómoda.
  • Chromodoro. Chrome + Pomodoro: esta es la naturaleza de Chromodoro. No estamos exactamente ante una aplicación, sino que se trata de una extensión para el buscador por excelencia.
  • Marinara Timer. El caso de Marinara Timer es paradigmático. No solo cuenta con el temporizador para la técnica Pomodoro, también uno personalizado e incluso uno de cocina. Porque sí: en la vida hay que controlar los tiempos.

Ahora bien, estos no son más que unos cuantos ejemplos de las muchas alternativas que existen.

Nuestro consejo es que utilices las apps para sacar el máximo partido posible a la técnica Pomodoro y así disparar el rendimiento durante tu jornada de trabajo.

Chica trabajando con tablet
Chica trabajando con tablet

Visita nuestro coworking en Ontinyent

Si ya has probado este sistema y te ha convencido, es el momento de convencer al resto del coworking.

No necesitas que todo el mundo siga tu dinámica. No obstante, cuando vean tu éxito en términos de rendimiento, no tardarán en copiarte.

Ahora bien, esto jamás llega a funcionar si no se tienen unas buenas oficinas que incentiven la concentración. Por lo que te animamos a que busques un lugar óptimo para desarrollar tu jornada laboral.

Si no sabes por dónde empezar, visita nuestras ofis. Estamos en Ontinyent, Valencia, y queremos dar cobijo a tu modelo de negocio.

Y sí, la técnica Pomodoro es muy habitual entre nuestros inquilinos.

¿Te gusta lo que ves? Escríbenos y te reservaremos una cita para que veas los espacios que tenemos para ti.

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