Si tienes un negocio, deberías saber cómo preparar una conferencia. Te puede hacer falta en más de una ocasión.
Por ejemplo, es fundamental a la hora de captar nuevos socios o inversores, presentar nuevos productos, definir estrategias, dar anuncios importantes, impartir formaciones…
En CWO queremos que lo des todo en cada discurso. Que demuestres tu confianza y que todos los asistentes se queden satisfechos.
Por eso, te animamos a que te dejes los nervios en casa. Hoy te enseñamos cómo dar una charla en público.
Hablar en público y saber comunicar es una de las habilidades más útiles tanto en la vida personal como profesional. Trabaja tu oratoria y consigue tus objetivos.
Cómo dar una buena conferencia
¿Recuerdas esas poderosas conferencias de Steve Jobs? ¡Vaya maestro de la oratoria!
Puede que nunca llegues al nivel del director de Apple. Pero esto no significa que no puedas tener reuniones de lo más interesantes.
No importa el tema. Saber cómo preparar una conferencia exitosa es algo que se puede aprender.
Así que en el equipo de CWO te dejamos una hoja de ruta. Una pequeña guía que puedes seguir en todos los casos.
¡Se acabó eso de sentir un nudo en el estómago! ¡Menos todavía un temblor en la voz!
Demuestra al mundo tu confianza en ti mismo y haz que toda tu audiencia se quede enamorada de tu presencia en la sala.
Plantea bien los objetivos y define el discurso
Si hablamos sobre cómo dar una conferencia exitosa, es evidente que el primer paso es saber qué se va a decir.
No vayas a ciegas. Perderás tu tiempo y, lo que es peor, harás perderlo a tus asistentes.
En su lugar, define de antemano cuáles son los objetivos. Es decir, plantea todos los temas que quieres tratar.
Acto seguido, crea un guión. Lo puedes memorizar o tener un simple esquema para saber siempre qué toca decir en cada momento.
Por último, haz presentaciones audiovisuales. ¡Innova! No hagas un PowerPoint aburrido. Eso ya está muy visto.
Alquila una oficina bien equipada
¿Imaginas hablar con optimismo en una sala oscura y sin ventanas? Vaya agobio.
Y es que en esto de cómo preparar una conferencia, el alquiler del lugar es una parte importantísima.
Nuestro consejo es que busques una buena oficina. Que sea amplia, cómoda y, a ser posible, con todos los soportes audiovisuales que necesites.
Así asegurarás la comodidad de todos los asistentes. Porque nada molesta más que una silla que impide estar a gusto.
Si no sabes por dónde empezar a buscar, echa un vistazo a nuestras oficinas de alquiler en Ontinyent.
Tenemos salas con capacidad para más de 50 personas. Aunque, si se te quedan grandes, también disponemos de espacios para unos 10 asistentes.
Además, al terminar la reunión, podéis tomar un café todos juntos. Ideal para una sesión de networking.
Comprueba todos los soportes
Ve unas horas antes a la sala para hacer todas las comprobaciones pertinentes. Así evitarás errores durante el evento.
En CWO nos comprometemos para que todo esté perfectamente preparado para cuando llegues.
La televisión, la pizarra, el proyecto, el rotafolio… ¡Pide por esa boquita y se te concederá! Elementos clave si te planteas cómo dar una conferencia dinámica.
No obstante, los problemas con los formatos de tus presentaciones ya escapan a nuestro control.
Pásate por la sala y asegúrate de que todo tu soporte audiovisual y gráfico funciona sin margen de error.
Deja tiempo para la ronda de preguntas
Puede que te interese esto de cómo dar una charla para hacer una presentación ante socios o inversores.
Quizás sea una formación presencial para tus empleados.
También es posible que se trate de una reunión para definir nuevas estrategias corporativas.
El abanico de posibilidades es inmenso. Pero, en todos los casos, es importante que reserves tiempo para una ronda de preguntas al final.
Si tus asistentes se marchan con dudas, les quedará un pequeño sabor agridulce. Como si tuvieran una palabra en la punta de la lengua.
Cuando estés creando el guión, ten en cuenta que al menos un cuarto del tiempo debe destinarse a esta materia.
Es la oportunidad de conectar de verdad con tu público. De demostrar que estás ahí siempre que lo necesiten.
Cómo dar una charla en público
Ahora que ya sabes cómo preparar una conferencia, es el momento de explicar la mejor forma de hablar en público.
Dicen que lo mejor es imaginarse a los asistentes desnudos. Que esto quita los nervios. Pero, ¿realmente alguien está pensando en esto? ¡No tiene ni pies ni cabeza!
Si quieres averiguar cómo dar una buena conferencia y que los nervios no te jueguen malas pasadas, quizás lo mejor sea apuntarse a un curso de oratoria.
Sin embargo, desde CWO te dejamos unos tips para que todo vaya como la seda:
- Sigue el guión que has planeado. No te salgas de la hoja de ruta que has planeado. Deja ciertos temas en standby si vas muy pillado de tiempos. Pero esto es algo que debes haber pensado de antes. Mantente siempre dentro del camino y tendrás seguridad en ti mismo.
- Busca el lenguaje adecuado. No todos los públicos son iguales; por lo que, en esto de cómo dar una conferencia, hay que adaptarse al lenguaje de la audiencia. ¿Más formal? ¿Tal vez coloquial? No hay una respuesta mala y una buena. Todo depende de a quién te estés dirigiendo.
- No todo está en la palabra: el lenguaje no verbal. El lenguaje es mucho más que el uso de la palabra. Son los gestos que expresas. Evita gestos demasiado abruptos. No cruces los brazos. Y, en cuanto al contacto visual, siempre en los ojos de los asistentes. Así demostrarás la confianza de una forma sutil.
- Ten una botella de agua a mano. Este truquillo no solo te servirá para aclarar la garganta. Si en algún momento de trabas u olvidas el discurso, ¡calma! Respira, bebe un traguito de agua y a continuar. Nadie se dará cuenta del error.
Esperamos que te hayan servido todos nuestros consejos sobre cómo preparar una conferencia. ¡En nuestro equipo lo hacemos siempre así!
Porque sabemos que la improvisación no suele ser una buena idea. Lo mejor es sentarse, pensar y planear.
Eso sí, queremos darte un tip extra: disfruta.
Disfruta de estos momentos. Estás hablando con un público que te presta atención. Comentando temas que te apasionan.
Una actitud que contagiarás a tu audiencia para que viváis las reuniones más entretenidas.
